
Si quieres tener un rincón de paz y sosiego en tu hogar, nada mejor que diseñar un jardín en casa.Existen muchos tipos de jardines, desde el jardín vertical, el jardín inglés y uno de los más especiales; el jardín zen.
Aprovecha esos metros aéreos de los que dispones para tener un espacio grande y único en la casa en el que descansar, relajarte, meditar o disfrutar de la tarde con un libro en la mano y un café humeante. Si nos dispones de un espacio exterior, no olvides que también puedes hacer tu propio jardín zen en espacios interiores e incluso puedes disfrutar de los jardines zen o en miniatura.
Para hacer un jardín zen se necesitan algunas nociones básicas de jardinería y ciertas plantas que te ayudarán a crear esa atmósfera serena y relajada típica de Oriente en tu propia terraza o jardín. El secreto de estos jardines de aspecto rústico es un equilibrio entre la presencia de plantas y de elementos pues ellos también ocupan un lugar central en el diseño muy tendente al pensamiento del feng shui.
Las ideas para diseñar un jardín zen
Toma inspiración de películas o revistas para tener una idea de qué tipo de jardín zen quieres tener en tu hogar, ya que varían mucho de acuerdo al clima y a la extensión del lugar con la que cuentes. Una vez que tengas una idea de lo que puedes armar, comienza a conseguir todos los elementos necesarios.
Para ello anota en un cuaderno la variedad de plantas así como el mobiliario y la luminaria que necesitarás. También los materiales para los senderos, los caminos y las composiciones.
Recuerda que debes adaptarte al espacio del que dispongas, por lo que es fundamental mantener el equilibrio entre todos los elementos y evitar que quede demasiado recargado.
Los elementos del jardín zen
Los jardines zen son también conocidos como jardines secos, porque en ellos siempre están presentes los siguientes elementos:
- Arena: la arena representa al serenidad, la calma y la tranquilidad
- Piedras y grava: las piedras y la grava representan los obstáculos que se presentan a lo largo de la vida, así como cada una de las experiencias que van formando la vida de una persona
- Bambú: la planta de bambú representa la buena suerte
- Madera: el elemento madera simboliza la primavera y el crecimiento personal
- Plantas: las plantas representan la vitalidad y la alegría
También verás en muchos diseños de jardines zen que se incluyen estanques o pequeños recipientes con agua, uno de los elementos sagrados de Oriente.
Ubicación y diseño del jardín zen
Es importante definir el espacio de un jardín zen pues ya que es posible utilizar todo el espacio disponible o sólo un sector. Estos jardines son luga ser tranquilos que no deben de perder su forma por eso es importante elegir una ubicación serena y sin ruido, así como un lugar en donde no haya una gran presencia de árboles para evitar que ensucien el jardín al caer las hojas. Un rincón aislado es lo ideal para favorecer el descanso y la tranquilidad.
En cuanto al diseño, elige uno con formas sencillas pues en estos jardines debe predominar el minimalismo. Puedes crear senderos con piedras y también apilarlas en un rincón. También es posible formar un camino con arena que luego será rastrillada para crear el efecto “olas” o bien colocar algunas rocas o grupos de rocas en lugares estratégicos.
Respecto a la disposición de los elementos, las pautas son las siguientes:
- El terreno debe de estar lo más plano posible, y la arena debe de distribuirse por toda la zona. Para ayudarnos en esta tarea podemos utilizar un rastrillo que nos ayudará a esparcirla de forma uniforme
- Las piedras pueden distribuirse de forma simultánea, aunque lo aconsejable es que se coloque un número impar. Lo ideal es elegir piedras de diversos colores y líneas irregulares
- No olvides colocar plantas frondosas, ya que le darán al jardín zen el toque de armonía y color. Los tonos azulados representan valores positivos, y los rosados atraen el amor
- También es importante la presencia de agua (fuentes, cascadas, arroyuelos) porque el agua representa la fuente de vida, y si está en movimiento será mucho mejor, puesto que el sonido es muy relajante. Eso sí, es importante que el agua fluya ya sea a través de un pequeño arroyo o una fuente, nunca debe de haber agua estancada
El terreno del jardín zen
Para hacer un jardín zen grande o pequeño hay que contar con un terreno plano. Si no lo tienes, habrá que preparar la tierra para tal fin quitando ramas y hierbas y agregando tierra de ser necesario. Una vez finalizadas estas labores, es importante colocar una malla plástica sobre el terreno y ajustarla con clavos para evitar que nazcan nuevos brotes y raíces.
Lo ideal para crear un terreno adecuado a nuestro jardín zen es delimitar las zonas, por ejemplo a través de las piedras. Puede tener forma cuadrada o rectangular, pero no olvides la importancia de crear senderos en el diseño de un jardín zen.
Los senderos son el camino que nos permitirá disfrutar de todo el jardín zen en su conjunto, de la paz y de la relajación que debe de transmitir cada elemento. Estos senderos pueden construirse con piedras o con listones de madera, siempre respetando los elementos fundamentales de este tipo de espacios naturales. Además tienen un significado muy especial: los senderos simbolizan el avance hacia el progreso en la vida.
Las plantas en el jardín zen
Existen ciertas plantas típicas de un jardín zen que puedes elegir para crear este espacio soñado. Algunas clásicas son el arce japonés, los bonsais, las azaleas, las plantas de bambú, el abeto de Corea, el cerezo ornamental japonés o el Prunus ornamental así como diferentes variedades de hosta.
Lo importante a la hora de elegir las plantas de nuestro jardín zen es optar por especies que puedan crecer sin inconvenientes en el lugar en el que vives para que se adapten sin problemas al clima local. Para los lugares con sombra, opta por los helechos y recuerda que las plantas típicas de los jardines zen prefieren los suelos algo ácidos.
Elementos secundarios del jardín zen
Finalmente, cuando ya está listo el diseño general, es hora de prestar atención a los detalles finales como por ejemplo:
- Puedes añadir una luminaria de estilo oriental y velas para así dar mayor vida al lugar a través de una luz tenue y relajante
- Otro de los elementos que pueden darle a tu jardín zen el toque místico perfecto son las pequeñas figuras de Buda sonriente
- Las conchas representan el mar y al igual que las caracolas combinan muy bien con las piedras del jardín
- Las varas de incienso son el aroma perfecto para acompañar al ambiente tranquilo del jardín zen
Los jardines orientales zen en miniatura tienen un significado muy especial ya que representan el universo para la cultura japonesa. Se pueden colocar en cualquier rincón de la casa e incluso en la oficina aunque se recomienda tenerlo siempre en pequeños lugares de descanso o en una mesa de escritorio que podemos colocar debajo de las escaleras.
Los jardines zen proporcionan pequeños espacios de relax que sirven para descansar y meditar. Cuentan con varios accesorios; arena, un rastrillo, piedras e incluso un pequeño Buda. Son ideales como complementos de decoración e incluso en el caso de no tener tiempo para construir uno, podemos comprar un jardin zen en multitud de sitios especializados así como en tiendas online dedicadas a la venta de este tipo de jardines. No tienen un precio elevado, por lo que además de ser baratos puede convertirse en un estupendo regalo.
Si por el contrario decides crear tu propio jardín zen completo y bonito, en la web encontrarás multitud de imágenes y fotos que te guiarán paso a paso junto con tutoriales, trucos y consejos para usarlo. Además y para que practiques un poco, no dudes en visitar la web para utilizar tu propio jardin zen virtual.