Si eres de los que disfruta tener plantas en el hogar o jardín, seguro que conoces la begonia tuberosa. Esta planta es una de las más apreciadas por sus bonitas flores y su facilidad de cultivo. En este artículo te enseñaremos todo lo que necesitas saber para cultivar y cuidar tu begonia tuberosa de manera adecuada.
Descripción de begonia tuberosa
La begonia tuberosa (begonia x tuberhybrida) es una planta originaria de Sudamérica. Su nombre se debe a que sus tubérculos son los encargados de almacenar los nutrientes y la energía necesarios para su crecimiento y floración. Esta planta perenne se cultiva por sus llamativas flores y atractivas hojas. Sus principales características incluyen:
- Flores vistosas: las begonias tuberosas producen flores grandes, solitarias o en racimos, que pueden ser de una amplia gama de colores, como rojo, naranja, amarillo, rosa o blanco. Estas flores tienen pétalos suaves y a menudo tienen una apariencia parecida a las rosas.
- Hojas Ddecorativas: Las hojas son de forma asimétrica y pueden ser dentadas o lobuladas. Además de su interés ornamental, las hojas son atractivas debido a su variación en tonos de verde y a veces presentan manchas plateadas o moteadas.
- Tamaño y forma variados: las begonias tuberosas pueden variar en tamaño desde plantas pequeñas de floración individual hasta arbustos más grandes con múltiples flores.
La begonia tuberosa es apreciada por sus hermosas flores y hojas decorativas. Su facilidad de cultivo y la disponibilidad de variedades de diferentes colores hacen que sea una elección popular para añadir color y belleza a jardines, macetas y paisajes.
En jardines de color y vida, la begonia tuberosa florece con alegría. Sus pétalos vibrantes, un espectáculo de amor, un regalo de la naturaleza, digno de admirar con fervor.
Tipos de begonia tuberosa
Existen muchas variedades y cultivares de begonias tuberosas, cada una con características únicas en cuanto a color, tamaño y forma de las flores. Algunos de los tipos más populares incluyen:
- Variedad Solenia: estas begonias tuberosas son conocidas por su floración abundante en colores brillantes como rojo, naranja y rosa. Son compactas y adecuadas para macetas y jardines.
- Variedad Nonstop: este tipo de begonia tuberosa produce flores grandes y dobles en una amplia gama de colores, incluyendo rojo, rosa, naranja y amarillo. Son conocidas por su resistencia y floración continua.
- Variedad Pin-Up: estas begonias tienen flores en forma de copa con colores intensos y vibrantes. Son resistentes y se destacan en jardines y contenedores.
- Begonia Pendula: a diferencia de las begonias tuberosas estándar que tienen un hábito de crecimiento erguido, las begonias tuberosas pendulares cuelgan y son ideales para cestas colgantes y macetas elevadas.
- Variedad Apricot Shades: este cultivar tiene flores de tonos suaves de albaricoque, melocotón y rosa. Es apreciada por su suavidad y elegancia.
- Variedad Double Picotee: se trata de un tipo de begonias tuberosas con flores dobles y bordes de contraste, creando un efecto picoteado. Son llamativas y únicas.
- Variedad Bossa Nova: con flores grandes y vibrantes, esta variedad es conocida por su resistencia a las enfermedades y su capacidad para soportar climas cálidos.
- Variedad Illumination: estas begonias tienen una amplia gama de colores y flores grandes y llamativas. Son populares tanto en jardines como en macetas.
Estos son solo algunos ejemplos de los tipos de begonias tuberosas disponibles. Cada uno tiene sus propias características y atractivos, lo que permite a los jardineros elegir la variedad que mejor se adapte a sus preferencias y necesidades de diseño paisajístico.
¿Cómo se reproducen las begonias tuberosas?
Las begonias tuberosas se reproducen por bulbos o tubérculos. Los bulbos se pueden obtener de la planta madre o se pueden comprar en una tienda de jardinería. Para reproducir la begonia tuberosa se deben seguir los siguientes pasos:
- Al final del verano, cuando la planta ha terminado de florecer, se debe dejar que las hojas se marchiten y se sequen por completo.
- Después, se debe extraer el bulbo de la tierra con cuidado y se debe eliminar el exceso de tierra y las raíces secas.
- Se deben dejar secar los bulbos durante unos días en un lugar fresco y seco.
- Una vez secos, se pueden almacenar en un lugar fresco y seco hasta la primavera, cuando se puedan plantar de nuevo.
Cultivo
El cultivo de begonias, que pueden ser plantadas en macetas o directamente en el suelo del jardín, es relativamente sencillo y puede proporcionar hermosas flores durante la temporada de crecimiento. Los siguientes, son los pasos básicos para cultivar begonias tuberosas de forma exitosa:
- Comienza por adquirir tubérculos de begonias tuberosas de calidad, salvo que dispongas de tu propios tubérculos. Asegúrate de seleccionar los tubérculos sanos, firmes y sin signos de pudrición.
- Las begonias tuberosas prosperan en áreas con sombra parcial o luz indirecta. Evita la luz solar directa durante las horas más intensas del día, ya que esto puede dañar las hojas y flores.
- Elige un sustrato bien drenado y rico en materia orgánica. Las begonias tuberosas prefieren un pH ligeramente ácido a neutro. Si las vas a plantar en macetas, asegúrate de que tengan agujeros de drenaje en la parte inferior.
- Planta los tubérculos en primavera, después de que haya pasado todo riesgo de heladas. Deben enterrarse a una profundidad de aproximadamente 2-3 cm con el lado convexo hacia arriba. Planta múltiples tubérculos con un espacio de 15-30 cm entre ellos, dependiendo del tamaño de la variedad.
- Después de plantar los tubérculos, riega ligeramente para asentar el sustrato alrededor de ellos. Evita el riego excesivo.
- Si lo deseas, puedes cubrir el sustrato con una capa fina de mantillo o compost para ayudar a retener la humedad y mantener la temperatura del suelo estable.
Siguiendo estos pasos, puedes plantar con éxito las begonias tuberosas y disfrutar de sus hermosas flores durante la temporada de crecimiento.
Begonia tuberosa: cuidados
La begonia tuberosa es una planta relativamente fácil de cuidar, pero aún así requiere atención y ciertos cuidados para prosperar y florecer de manera óptima. Proporcionarle a la begonia cuidados adecuados es esencial para garantizar su salud, belleza y longevidad, así como para mantener la estética y el rendimiento en el jardín o en espacios exteriores. A tal efecto, compartimos los cuidados de las begonias tuberosas:
Luz
Esta planta tuberosa necesita de una cantidad moderada de luz para crecer y florecer adecuadamente. Se recomienda ubicarla en un lugar con luz indirecta, ya que la exposición directa al sol puede quemar sus hojas y flores.
Si la vas a plantar en maceta, asegúrate de cambiarla de lugar si notas que las hojas empiezan a ponerse amarillas o marrones en las puntas, puesto que esto es una señal de que está recibiendo demasiada luz.
Riego
El riego de la begonia tuberosa debe ser moderado, evitando tanto el exceso como la falta de agua. Asegúrate de regarla cuando la capa superior de la tierra esté seca, y evita el riego en exceso para no encharcar las raíces.
En lo que se refiere al cuidado de begonias, es importante no mojar las hojas ni las flores al regar, ya que esto puede provocar la aparición de enfermedades y plagas.
Temperaturas
Esta planta no soporta las temperaturas extremas ni las heladas. Por ello, debes procurar mantenerla en un lugar con una temperatura de entre 15 y 25 grados centígrados. En invierno, puedes protegerla de las bajas temperaturas ubicándola en un lugar cerrado y resguardado. Esto representa una parte importante de la rutina de cuidado de las begonias.
Proveerle a tus begonias tuberosas cuidados adecuados te permitirá disfrutar de la belleza de estas atractivas plantas en tu jardín o en macetas durante la temporada de crecimiento.
Plagas y enfermedades
La begonia tuberosa puede verse afectada por diversas plagas y enfermedades. Algunas de las plagas más comunes son los ácaros, pulgones y cochinillas. Estas plagas pueden ser controladas mediante la aplicación de insecticidas específicos para cada tipo de plaga.
Las enfermedades más comunes son la podredumbre de raíz y la pudrición de la base del tallo. Estas enfermedades pueden ser evitadas mediante el cuidado adecuado de la planta, evitando el exceso de riego y asegurando una buena ventilación y drenaje del suelo.
